martes, 9 de febrero de 2016

La lucha por la igualdad

Hoy he leído un post sobre los padres que mencionamos a nuestras hijas cuando hablamos de sexismo. Yo suelo hacerlo en mis posts. Me ha tocado las narices. Para los que entendáis inglés, recomiendo su lectura.

Yo entiendo que quienes mencionan a sus hijas para decir que son el motivo por el que se han vuelto luchadores pro-igualdad, están en el fondo diciendo que antes no lo eran. Vale, bien. ¿Y qué? Para empezar, eso no significa que antes fuesen machistas: sólo que no eran activamente feministas. Y, aún así, ¿y qué si lo eran? ¿Acaso su cambio no es motivo de alegría?

El problema de las luchas por la igualdad, los derechos sociales o contra la injusticia es que a veces acaban siendo una lucha por ver quién es más guay en esto de los derechos. "No mira, es que tú estás de acuerdo con la igualdad, pero yo soy súper-pro y molo más porque doy lecciones a los demás sobre cómo tienen que hacer las cosas". Pero bueno, ¿de qué va la gente?

En mi comentario al post menciono que echo de menos algún artículo o comentario en que una mujer diga algo así como "qué bien: mi compañero, que era un machista de aúpa, ha venido a decirme que ha cambiado de opinión". En serio: ¿no es digno de celebración ganar pequeñas batallas como ésa? ¡No! Porque ha cambiado de opinión debido a que ha tenido una hija: entonces pasa de ser un machista a secas a un padre machista proteccionista. Tócate las narices.

Porque esa es otra: Es cierto que existe la visión de que los padres somos más proteccionistas con las niñas que con los niños. Ignoro si es verdad, porque de momento no percibo tal sentimiento en mí. De hecho, actualmente me siento más luchador por los derechos de mi hijo mayor como gamer que de mi hija. La semana pasada escribí a tres concejales del ayuntamiento de mi pueblo sobre el tema. No me han hecho ni puñetero caso, pero eso es otra historia. La cuestión es que, creo yo, cualquier progenitor, padre o madre, es y debe ser algo proteccionista con sus hijos, pero especialmente con aquellos que sufren o pueden sufrir injusticias sociales. Y, ¡sorpresa! Las niñas sufren más desigualdad que los niños: ¡de eso va todo esto!

La lucha por la igualdad es eso: luchar porque la gente piense que somos iguales y actúe en consecuencia y, así, la sociedad y el sistema acaben siendo igualitarios. Cada "conversión" es una victoria. ¿Por qué hay que machacar a la gente cuestionando sus porqués? Y léase bien: es luchar por lo que la gente piensa, no porque se vuelvan activistas. Si se vuelven activistas, genial, pero no es de lo que se trata. Si un padre tiene una hija y la menciona, igual era un machista o igual no. Igual, simplemente no era activista y ahora lo es. ¿Es un crimen? ¿Es que todo el mundo debe ser un activista social en pos de tus causas? ¿O sólo del feminismo? ¿O de todo... y de nada?

Y es normal, y tenemos que entender que la gente se hace activista porque el asunto le toca personalmente, ya sea porque lo sufre en sus propias carnes, porque lo sufre alguien cercano o porque, simplemente, le ha tocado la fibra. Todos. Quien diga que no, es que no es consciente. La gente lucha por lo que tiene cerca o lo que le ha llamado la atención. No hay muchos feministas que sean activistas por los derechos de los niños con síndrome de Tourette. ¿Por qué? Porque no tienen un caso próximo, seguramente. ¿Es reprochable? No, claro que no. De hecho, hay muchos famosos que sufren una enfermedad y de pronto se vuelven activistas en favor de la causa, como Michael J. Fox con el Parkinson. ¿Creen que algún enfermo de Parkinson le ha reprochado que no se preocupó por la enfermedad hasta que la sufrió? ¡¿En serio?! Y, si dice que es lo que sucedió, que no se preocupó o no fue consciente hasta que la tuvo, ¿alguien escribirá un post sobre "por qué los enfermos de Parkinson no deberían decir que no eran activistas hasta que sufrieron Parkinson"?

Venga, hombre: es absurdo. Cada persona que no trate a las mujeres como si fuesen inferiores o tontas; cada gamer que felicita sabiendo que es una mujer por cómo juega, y no porque [léase con voz idiota] "caray, no sabía que una tía pudiese jugar así"; cada vez que un programador trata a su compañera como una igual, en todos esos casos se produce un pequeño cambio en el mundo. Para bien.

Da igual qué motivos les lleve a ser así: están de nuestro lado. ¿Es necesario machacarles a lecciones?

No hay comentarios:

Publicar un comentario